6 feb 2012

Desde que he leído esta historieta, no me atrevo a salir al jardín... ¿Qué opinan ustedes?


Cuando el anciano señor Bonifacio salió de buena mañana a regar los geranios que malvivían en su mísero balcón urbano, no esperaba encontrar unos sorprendentes huevecillos azules aposentados sobre la tierra de las macetas. Lo que menos se imaginó entonces es que a mediodía sólo iban a quedar las cáscaras vacías. Y tampoco suponía que a la ambigua hora del crepúsculo, las plantas desaparecerían, arrancadas de cuajo.
Pero con la llegada de la noche, un funesto presentimiento se apoderó de su alma: el anciano señor Bonifacio ya sabía con dócil resignación que se convertiría sin duda alguna en el plato principal de una perversa cena.

9 comentarios:

  1. ¿de unos huevos azules no salen los príncipes?... ya sabía yo que algo fallaba...
    En serio.. me ha dado miedo.. (soy extremadamente miedosa para estas tonterías).. creo que voy a dejar que se mueran las macetas del balcón..

    Besos de pata negra!!

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  2. debio darse cuenta que por el color azul no debía recogerlos. la curiosidad pudo más.

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  3. Bueno pues ya que el hombre tiene esa dócil resignación, que se duche bien y se ponga de limpio, jejej.
    Saluditos Sir.

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  4. No entra el comentario, quizás salga duplicado. Otro día lo intento.
    Saluditos Sir.

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  5. Si es que es bien sabido que no todos tenemos buena mano para las plantas, y asi luego pasan estas cosas...

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  6. Creo que hoy no voy a regar las plantas...
    Un abrazo.
    HD

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  7. Qué corta se ha hecho la historia. Ahora que la criatura había salido del cascarón y tenía tanto que vivir. Espero que haya una segunda parte.El viejo señor Bonifacio se merece un homenaje.

    Nos leemos.

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  8. ¿Huevecillos azules? Dios, qué miedo.
    Jaja, me ha encantado el punto de humor.

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  9. Glub...!!, mi casa también tiene jardín, pero nunca macetas, creo que ese detalle me salva.... ¿o no?

    Saludos, Sir.

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Este aristócrata ocioso y decadente leerá sus opiniones con sumo interés.